Hay
que hacer una transferencia de fondos para pagar 20 millones de pesos a los
"chicos" de la empresa recolectora de basura Urbaser, que son también
muy amigos y socios del alcalde Serulle. Sin embargo, hay un grupo de regidores
que no están "debidamente amarrados" y están boicoteando la
aprobación de ese millonario pago.
Como
ya el alcalde Serulle no puede hablar de honestidad y transparencia, hay
regidores que le han tomado "las señas" y no están en eso de que
"todo se vaya para un solo lado".
Es
posible que en la próxima sesión se apruebe la transferencia de fondos para
pagar los 20 millones de pesos a Urbaser, pero primero hay que hablar "un
convincente español" con varios regidores. ¿Llegó la transparencia Gilberto?