El tigre duró 87 horas con la mano
pegada al BMW hasta que se lo ganó:
Song
Changjiang tiene 27 años y, ahora también, un flamante BMW al que sólo tendrá
que limpiar los restos de las huellas dactilares que usó para conseguirlo.
Porque se ha ganado el derecho a conducir su Serie 1 después de mantener la
mano pegada a él durante 4 días y 3 noches, en uno de los concursos más
delirantes de los que tenemos noticias.
Se
llamaba “¿Quién puede mantener su mano en el BMW?” y se trataba precisamente de
eso, de pegar la mano al coche y aguantar el mayor tiempo posible.
Participaron
120 concursantes, de edades comprendidas entre 18 y 40 años; y los
organizadores (una inmobiliaria en China) sacaron unos pocos vehículos con
calcomanías en forma de palma sobre ellos, donde los participantes tendrían que
mantener sus manos durante tanto tiempo como pudieran.
¿Y
cómo iban al baño? ¿Lo hacían allí mismo? Pues como cortesía, los organizadores
les dejaban 15 minutos cada 4 horas para comer, dormir o ir a sentarse al WC.
Así hasta que al final sólo quedaron tres en pie.
Uno
de ellos tuvo que dejarlo entre lágrimas, después de que sus piernas se habían
hinchado tanto que ni siquiera podía caminar; y el segundo claudicó tres horas
más tarde, fruto de intensos calambres.