Ya
lo de Frederick Martínez El Pachá se está saliendo de control, el hombre ha
dado más grito que un niño a falta de su teta por el famoso premio del
Casandra.
El
hombre después que el año pasado se bajó los pantalones en los Premios Casandra
porque se sentía que estaba en una letrina, hoy sigue llorando por el mismo
retrete, ya que su referido premio se lo entregaron a otro.
Ya
es bueno que El Pachá se calle, tiene a todo el mundo harto hablando la misma
plepla. “Ahora al tipo le interesa la letrina”.