De un tiempo acá el Ministerio del Interior realizó una agresiva campaña publicitaria con el afán de que la ciudadanía respete a los miembros policiales, que se apoye y colabore con la labor que realizan los efectivos del “orden”, y nosotros, los que muchas veces hemos sido violentados sin explicación alguna, sin mediar razonamientos mínimos, nunca nos quejamos de roturas de cabeza resultado de un macanazo o de empellones de los caballos que nos producían contusiones que teníamos que soportar porque nos tratan como animales.
Acaso nosotros no merecemos un respeto también por nuestra calidad de fin supremo de la sociedad y del Estado?. ¡Y el respeto a los derechos fundamentales de las personas que norma la constitución?, y el derecho al honor, a la buena reputación, a no ser estigmatizado donde quedaron?
Preguntémonos entonces que calidad moral tienen los pseudos guardianes del orden para que se les tenga un mínimo de respeto?
