Bautista Cabrera, el padre de los quintillizos que alumbró Albania Elizabeth Herrera, en el Hospital Metropolitano de Santiago, prefiere no conocer por estos días a los recién nacidos, para no arriesgar su trabajo de chiripero en Puerto Plata. Su ausencia de la habitación 301, del referido centro asistencial, es suplida por Mercedes María Herrera, madre de Albania y otros siete hermanos, quien la acompaña permanentemente, a la espera de que los niños sean llevados allí, en vista de que todavía la mañana de este martes permanecían en incubadoras. Doña Mercedes se ha comunicado más de una vez con su yerno, fundamentalmente para mantenerlo al tanto de la evolución de su esposa y de los niños (tres varones y dos hembras) “pero él vendría a la clínica en caso de extrema necesidad, porque no quiere perder el trabajo”.