Si la Secretaría de Educación no se pone las pilas y busca antes de que inicie la semana próxima los 300 millones que les adeuda a los afiliados a la Unión de Medianos y Pequeños Industriales de la Harina, (UMPIH), el desayuno escolar se quedará sin pan. La advertencia de que suspenderán el suministro, fue hecha este martes por Francisco Capellán, presidente de la UMPIH, quien reprocha al secretario Melanio Paredes que faltara a su promesa de saldar la deuda antes de diciembre del año pasado. Admite Capellán, que algunos panaderos han recibido pagos de pequeños montos, pero insiste en que eso no resuelve el problema. “Pero eso significa que a gente que le deben 100 pesos, por ejemplo, le paguen 25, y que a renglón seguido le tomen créditos por 150, lo que genera nuevos incrementos de la deuda en niveles muy superiores a la que tenía antes del pago del 25 por ciento”, añade Capellán.