La cantante británica Amy Winehouse se declaró hoy culpable de los delitos de agresión y desórdenes públicos, en relación con un altercado ocurrido en vísperas de la pasada Navidad en la localidad de Milton Keynes, al sur de Inglaterra. En su comparecencia en el juzgado, Winehouse admitió haber agredido a Richard Pound, director de un teatro de la citada localidad, durante la representación de una comedia musical navideña. Según la acusación, la agresión ocurrió después de que Pound recriminara a la cantante haber interrumpido en estado de ebriedad la función, en la que se representaba
Efe